Nacidas para sufrir

ACOSTUMBRADAS A SUFRIR

Miguel Albaladejo lleva a la gran pantalla una insólita historia con una base argumental cómica, pero con un trasfondo trágico basado en la que podría ser una historia cualquiera de una crónica particular de sucesos. Adriana Ozores y Petra Martínez acumulan sufrimiento en esta historia.

La picaresca española va unida a la cultura del país desde mucho antes de que el hoy llamado Reino de España fuera tal. Personajes como El Lazarillo de Tormes o Rinconete y Cortadillo han pasado a los anales de la historia de la literatura española por narrar las aventuras y desventuras de unos personajes que quieren vivir a costa de los demás sin trabajar. Pero la picaresca no sólo está en esa virtud de sobrevivir sin dar un palo al agua. También es fácilmente reconocible en las acciones de quienes quieren eludir un paso obligado por la ley utilizando, a veces, una alternativa legal, del todo ilegítima para conseguir su fin.Esto es lo que el director Miguel Albaladejo ha querido plasmar en su última película Nacidas para sufrir.

Según el propio Albaladejo ha declarado, con este película ha pretendido evocar el cine español de mediados del siglo XX, caracterizado por estar impregnado de realismo en cada escena. Una Adriana Ozores (Purita) espléndida da vida a una débil y manejable muchacha provinciana, asustada de la vida y sin más aspiraciones que cumplir intachablemente con su trabajo como asistenta de una anciana inquieta y moderna, interpretada por Petra Martínez (Flora), que demuestra una vez más su soltura y naturalidad ante la cámara. Flora pide en matrimonio a Purita sólo para evitar que sean sus interesadas sobrinas (Malena Alterio y Mariola Fuentes) las que le hereden.

Una serie de hechos del pasado trastocarán los planes de las protagonistas dando un giro argumental a la película que hará que el espectador se impaciente por saber cómo es el desarrollo de la historia. En esta fase, las artimañas de la madre de Purita juegan un papel crucial. La madre toma vida en la actriz  María Alfonsa Rosso, cuya poco acertada caracterización como anciana le resta mucha credibilidad a su personaje.

La actriz Adriana Ozores protagoniza Nacidas para sufrir

Miguel Albaladejo ha aportado a Adriana Ozores un papel en el que la actriz ha podido demostrar que sus registros no se limitan únicamente a personajes de nuestros días o encasillados en comedia. Como ya expresara en la gran pantalla su padre, el gran José Luis Ozores, Adriana habla con el gesto, con sus movimientos, con el sentimiento que le oprime por la fuerza de este guión. Nacidas para sufrir acerca a la pantalla a míticas actrices españolas como  Marta Fernández Muro, María Elena Flores o Josele Román que hace un cameo y que según declaró en el programa Efecto Madrid se sintió muy feliz trabajando con Albaladejo para esta película. Malena Alterio y Mariola Fuentes aportan los toques de humor adicionales.