Shevernatze. Una epopeya marcha atrás
Esta película independiente no tiene nada que envidiar a los filmes que entran dentro del circuito comercial. El esfuerzo de su director, Pablo Palázón, y del equipo que ha participado en la película, la ha llevado a la pantalla grande para «probar» la reacción del público, tras haber ganado diversos premios en festivales cinematográficos antes de su estreno. A partir de ahí el éxito puede acompañar a Shevernatze. Una epopeya marcha atrás.
El ingenio y las ideas originales necesitan no sólo de inspiración, sino también de mucho empeño para poder ser plasmados en un formato que pueda llegar al gran público. Afortunadamente, esa originalidad parece que aumenta con el paso de los años y garantiza la innovación para el futuro. Esto es lo que demuestra Pablo Palazón con su primer largometraje Shevernatze. Una epopeya marcha atrás.
Jonás (Jesús Noguero) es un conductor de autoescuela abandonado por su novia (Melanie Olivares), apasionado por el aeromodelismo y amargado por su jefe decide llevar a cabo una hazaña de la que no sabe como saldrá: conducir su coche desde Madrid hasta Ávila marcha atrás. Tras adaptar el vehículo a las circunstancias, emprenderá el camino con la única intención de atravesar marcha atrás las murallas de la ciudad castellana. Por la carretera, encontrará dificultades que harán que el viaje, ya de por sí complicado, vaya sumando peripecias.
Shevernatze. Una epopeya marcha atrás es una película independiente que ha contado con la iniciativa material y económica de su director, Pablo Palazón, y con la ayuda del resto del equipo que la han realizado. Los actores han mostrado una actitud altruista ante este proyecto por el que han apostado fuerte y han trabajado en él superando las dificultades que en un rodaje de estas características pueden acontecer. Palazón dedica los títulos de crédito del film casi en su totalidad a dar las gracias a todos aquellos que han hecho posible que la película pueda exhibirse en Madrid y quien sabe si hará gira por España.
Este largometraje está realizado sin grandes pretensiones, pero el resultado manifiesta la ilusión y el empeño de quienes se han comprometido en el proyecto, dando como resultado un trabajo que entretiene al espectador y provoca la carcajada ante situaciones nada habituales. Dentro de un registro bajo para una fácil comprensión, transmite al espectador un mensaje de lucha por conseguir los objetivos inalcanzables y las recompensas que puede conllevar.