Iván-Off

Vivir la experiencia Iván-Off sirve de terapia a la vez que se disfruta de puro teatro fuera del teatro. Y es que La Casa de la Portera mezcla los estilos de vida austera del Madrid de los años cuarenta con el ingenio y la creación más moderna que le ha aportado Alberto Puraenvidia. Esta casa acoge esta temporada la morada de Iván, con sus habitantes, y el hogar de la familia Leyva, personajes adaptados todos ellos por Jose Martret a una realidad actual a partir del Ivanov de Chéjov. Ellos conducen al espectador por las estancias en las que se derrollan las escenas. El público va en búsqueda del futuro de los personajes.

El eje central de la historia es el personaje de Iván, tejido por Martret e intepretado por un Raúl Tejón que se sale, un Tejón que encoge el alma del espectador y le acongoja hasta el punto de querer darle un abrazo para que encuentre consuelo, pero la finísima cuarta pared de esta sala y el respeto al teatro impiden al público, a pesar de las ganas, ser el paño de lágrimas de ese hombre que sufre y no se lo guarda. Raúl consigue aliviar la situación a través de la buena templanza que le da a Iván y con la esperanza para todos de saber que puede volver a sentir y a ser feliz.

El resto de los actores aportan la chispa de la función. Las miradas inquietantes de Rocío Calvo y David González marcan la tensión de lo que, como personajes, están viviendo, provocando la risa nerviosa del espectador. Maribel Luis, en el personaje de la señora Leyva, se la cuela doblada al público. Su excesiva hospitalidad inicial no puede encerrar nada bueno. Y a Roberto Correcher, «el honrado doctor», dan ganas de nominarlo y echarlo de la casa desde que se presenta por lo que de manipulador y tedioso tiene.

Iván-Off no deja indiferente. El personaje de Iván despierta el sentimiento, las ganas de luchar contra el hastío y la necesidad de hacer algo por salir del bucle que nos inunda. Iván-Off es uno de esos regalos que la escena madrileña deja caer fortuitamente. Han llegado los reyes fuera de época, sin escribirles la carta y sin el plantón de la espera en la cabalgata.

La Casa de la Portera

Calle Abades, 24 – Bajo Dcha

Reservas 649 39 75 71

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Una respuesta a “Iván-Off

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